IN LAK’ECH – HALA KEN

Es el nombre del proyecto con el cual hacia finales del 2014 hice una residencia en Japón, gracias al apoyo de la prestigiosa fundación Saison Foundation, que impulsa la danza y teatro contemporáneos japoneses a través de varias líneas de acción, una de ellas es la de apoyar a directores artísticos y curadores de otras partes del mundo para que por un tiempo, puedan investigar y conocer más sobre las artes escénicas de este país.

Asistí a los festivales Dance New Air y Kyoto Experiment, donde pude ver puestas en escena y showcases, pero sabía que sería en la conversación tú a tú donde podría quizás contestarme o si acaso reelaborarme mejor ciertas preguntas, y enmarcar más claramente similitudes y diferencias  entre el contexto de la danza contemporánea mexicana y la japonesa.

En preparación a mis entrevistas, tanto la directora de programas de la Saison Foundation, Atsuko Hisano, como Taro Inamura también de esta fundación -y guía y gestor de mis encuentros durante mi tiempo de residencia- me advirtieron sobre la posibilidad de tener que hacer las entrevistas en dos sesiones dada la timidez característica de los japoneses, por lo que la apertura a contestar ciertas preguntas muy probablemente no sucedería en primera instancia. Contrariamente a esta advertencia, encontré que todos  estuvieron dispuestos a hablar y contestar cualquiera de mis preguntas, ya fuese un tema artístico o personal -derivado del curso de la conversación- con una gran generosidad.

Durante  aproximadamente un mes, entrevisté a coreógrafos, bailarines, directores de festivales y algunos representantes de instituciones para hacer un incipiente rastreo del contexto actual en el cual se desarrolla y percibe la danza contemporánea japonesa por parte de sus actores, para a partir de ahí, poder imaginar formas posibles de colaboración con la danza contemporánea mexicana.

Así, en mis conversaciones –aunque varias, muy breves- y asistiendo a ensayos de algunos de los artistas, se fueron dibujando las ideas de cuerpo, danza, país, estructuras institucionales, de la efervescencia de la danza contemporánea entre el 2000 y 2005, de su crisis actual (para algunos) y de los efectos de la tragedia de Fukushima en el 2011; todas estas reflexiones fueron ampliando y rectificando un imaginario que yo tenía en torno a la danza contemporánea en Japón.

A partir de esta residencia, mi reflexión en torno a cómo ejercitamos posibles curadurías en artes escénicas –mucho a tientas al ser en mi caso, por ejemplo, autodidactas- se enriqueció, al notar cómo las formas del diálogo y el conjunto de conversaciones, más que las obras, podían ir creando y/o fortaleciendo posibles líneas de exploración curatorial.

Al pensar en cómo hacer posible la difusión de todo lo visto y conversado, pensé que un blog podría abrir/continuar el diálogo no sólo con México, sino  Iberoamérica también. Cada entrevista va también proporcionando nuevas piezas  a este complejo rompecabezas -que revelarán para todo curioso-  a partir de links detonadores, nuevas reflexiones en torno a la red escénica en Asia y la relación con otros países fuera de este circuito, los mercados, la colaboración, el cuerpo, etc.

Este espacio es también una provocación para lograr más adelante concretar posibilidades de colaboración que ya en otros países latinoamericanos como Brasil –sin perder vista la relación histórica de migración con este país de oriente-, se dan.

Se abre la conversa, se abre para todos.

MARIANA ARTEAGA

 

Agradecimientos: SAISON FOUNDATION, Atsuko Hisano, Taro Inamura, Masaru      Susaki, Jorge A. Rodríguez,  Yuya Tsukahara, Kaori Seki, Chie Ito, Daisuke   Muto, Kita Mari, Yuriko Suzuki, Hiromi Maruoka, Fumi Yokobori, Shinji Ono,   Pijin Neiji, Takao Kawaguchi, Mikuni Yanaihara, Yuske Hashimoto y a todo el  equipo de trabajo de la Saison Foundation.
La realización de este blog es posible gracias al invaluable apoyo de la     Fundación Japón México.